Tu Visita Cuenta. MUCHAS GRACIAS!!!

sábado, 21 de agosto de 2010

PENSAMIENTO POSITIVO: EL PODER DE LA MENTE EN EL CUERPO


El mundo puede dividirse entre optimistas y pesimistas, entre los que ven la botella medio llena o medio vacía. Sin embargo, ser optimista o pesimista podría tener implicaciones que van más allá de un estado de ánimo.

Según una investigación de la Universidad de Texas, un gen relacionado con la serotonina, la llamada hormona del humor y el buen rollo, podría provocar un tamaño mayor de la región del tálamo cerebral denominada pulvinar. Lo que inclinaría a estas personas a ser pesimistas.

Y sí, ser pesimista puede tener cierto aire cool. Muchos pintores, escritores y cineastas se han caracterizado (y posiblemente hayan cimentado su éxito) en su pesimismo declarado, casi nihilista.

Sin embargo, una actitud optimista ejerce toda clase de beneficios en el cuerpo humano y, por extensión, en la vida diaria. Por de pronto, el pesimista presenta un debilitamiento de los sistemas inmunitario, endocrino y nervioso, según estudios de la Universidad de Wisconsin.

Según la clínica Mayo de Nueva York, incluso reduciría la esperanza de vida en un 19 %. Ser optimista significa tener un postoperatorio más fácil y una recuperación más rápida.

Potenciar un pensamiento positivo incluso incide en el rendimiento académico, tal y como afirma el psicólogo C. R. Zinder, de la Universidad de Kansas: los resultados académicos dependen más de una actitud optimista que del cociente intelectual.

Así pues, lo mejor que podéis hacer es mudaros a Vanuatu, el lugar que ha sido considerado como el más feliz y optimista del planeta. Eso si hacemos caso a la medición del Índice de Planeta Feliz (HPI) divulgado en 2006.

Situado en el Pacífico Sur, a 1750 kilómetros al este de Australia, en un archipiélago compuesto por 83 islas, en Vanuatu hay gente más feliz y optimista que en cualquier otro sitio. La medición no se basa en la cuota de sonrisas que sus ciudadanos dispensan al prójimo sino en la fórmula siguiente: Bienestar (cultura, gastronomía, etc.) por Esperanza de Vida dividido por Impacto Ecológico. El resultado de Vanuatu es de 68,2. España, con un 43, ocupa el puesto 97.

jueves, 12 de agosto de 2010

LA DISLEXIA





En este breve artículo vamos a tratar de esta –si bien muy nombrada, y por otro lado mal llamada– “enfermedad”, no del mismo modo conocida.

El retraso escolar, esconde a veces a un niño disléxico.
Se trata de estos famosos “vagos”, que sufren un auténtico calvario, cuando saben que sus padres y profesores piensan de ellos que no quieren aprender.


Se identifican mediante el síntoma –el más importante–, que es su dificultad en la lectura y escritura.

La dislexia no es una enfermedad, por lo tanto, no es algo que haya que curar.

La dislexia es una inhabilidad lecto-escritora, y a veces también una inhabilidad en la asignatura de matemáticas; por lo tanto, es algo que se puede corregir, y que aparece en el niño cuando comienza a aprender la abstracción del símbolo o de letras y números.

Esto es algo que tiene que ver con la forma de aprender del ser humano.

Hay personas que aprenden con el sonido de las palabras, y otras, mediante imágenes (estas son las más propensas a la dislexia).

Es importante que a la edad de cinco años, se enseñe la abstracción de la letra de forma visual, auditiva y gramática; asegurándonos de que el niño relaciona bien el sonido de esa letra con su imagen, y todas las posibles grafías de la misma.

Los disléxicos pueden hacer las cosas bien por la mañana y mal por la tarde.

Trabajan seis veces más, y rinden seis veces menos.

SÍNTOMAS ANTES DE LA LECTO-ESCRITURA

1. Torpeza psicomotriz fina, como: abrocharse botones, cordones de zapatos, colorear… y gruesa, como: bajar escaleras, dar volteretas, etc.

2. Dificultad para los juegos de pelota.

3. Parece que no escuchan… Están en su mundo.

4. Falta de equilibrio.

5. A veces, dificultad en pronunciar determinados fonemas.

6. Otitis serosa de repetición.

7. Distorsionan el sentido del tiempo, les cuesta aprender los días de la semana, los meses del año… ayer, hoy, mañana…

SÍNTOMAS DESPUÉS

1. Su lectura es entrecortada, silábica, imaginativa (se inventan palabras), se cambia de línea y se guía con el dedo.

2. A veces tiene falta de comprensión lectora; por lo general, en voz baja se enteran mejor que en voz alta.

3. Dificultad para comprender los problemas de matemáticas o aprenderse las tablas de multiplicar.

Confusión en la cantidad que se lleva, por ejemplo en una operación como la siguiente: 34 x 3, les sería difícil “recordar” correctamente que tienen que añadir 1, al multiplicar el 3 x 3. Comienzan las operaciones por el lado izquierdo.

4. Mala ortografía.

5. En la mayoría de los casos su letra es irregular, y en ocasiones, ilegible.

6. Cometen omisiones, substituciones e inversiones de letras y/o palabras.

7. El copiar de la pizarra, se les hace difícil.

8. Cogen mal el útil de escritura, sobre todo, al principio.

9. Posturas inusuales al leer y escribir; se acercan demasiado o tumban su cuerpo con exceso de movimiento en la silla.

10. Dolores de cabeza, de estómago y a veces, náuseas.

11. Son lentos en la ejecución de los deberes, convirtiéndolos en una lucha diaria. Necesitan a alguien a su lado.

12. Confusión de derecha e izquierda.

13. Mala orientación en el papel y en el giro de las letras y de los números.

14. Lateralidad cruzada.

15. Tienen falta de atención selectiva, es decir, sólo cuando estudian o hacen los deberes les cuesta concentrarse; son dispersos.

16. Son imaginativos, creativos y sensibles.

17. Baja autoestima.

18. Terrores nocturnos, miedos.

19. Eneuresis (orina).

20. Se hacen los payasos en clase.

viernes, 6 de agosto de 2010

NEURO-AURICULAR DE EMOTIV, LEE LA MENTE DE LOS JUGONES



Un auricular que lee la mente, tan sencillo como eso y tan complicado a la vez. La firma  Emotiv confirma a quien quiera escucharlo que ha creado un accesorio que es capaz de adentrarse en las profundidades de nuestro cerebrillo. ¿Verdad o pura inspiración?

El neuro-auricular Epoc se ocupa de interpretar la interacción de las neuronas en el cerebro, al menos eso asegura su fabricante. Lo que hace es registrar la actividad eléctrica del cerebro enviando señales inalámbricas a un ordenador. Para leer la actividad del cerebro utiliza el popular sistema encefalográfico (EEG) que no es invasivo y registra unos 100 billones de células nerviosas. Así, el auricular permitiría detectar hasta 30 expresiones, un conjunto de emociones, distintas acciones, expresiones faciales (risa, parpadeo, etc.) y acciones cognitivas (empujar, levantar, caer, etc.).

Lo más extraño de todo esto es que la última finalidad de Emotiv no es descubrir una cura para enfermedades como la esclerosis o el Alzheimer sino simplemente conocer como funciona el cerebro de los jugones para que puedan mover objetos con sólo pensar en la acción o bien leer las emociones de los jugadores y algunas otras posibilidades. Si bien este no es el primer auricular que lee el movimiento del cerebro, la firma asegura que es el primero destinado al mercado consumidor que ha sido diseñado para juegos. Saldrá a la venta en algún momento de 2008 por un precio de 299 dólares y ya hay algunos interesados como IBM que lo han tenido en cuenta para otros usos.